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Vida de fraternidad/hermandad de mujeres de College Park y Título IX

El Título IX de las Enmiendas Educativas de 1972 prohíbe la discriminación por motivos de sexo en programas educativos y actividades relacionadas. Las interpretaciones de los requisitos del Título IX han cambiado a lo largo de los años. Estas interpretaciones, combinadas con preguntas sobre el alcance del Título IX, pueden hacer que no quede claro exactamente cómo el Título IX afecta a las fraternidades y hermandades de mujeres en College Park.

La ley contiene exenciones y excepciones, algunas de las cuales están dirigidas específicamente a hermandades y fraternidades. La interacción entre la vida de fraternidad/hermandad de mujeres de College Park y el Título IX afecta las prácticas de membresía, así como aspectos de la vida social. Para obtener más información, comuníquese con un abogado defensor estudiantil calificado.

Prácticas de membresía

Si bien muchos estudiantes en College Park han escuchado que las fraternidades y hermandades de mujeres están exentas de los requisitos del Título IX, esto sólo es cierto con respecto a las prácticas de membresía y no a otros programas y actividades. Además, la exención sólo se aplica a hermandades y fraternidades sociales y no a fraternidades y hermandades honorarias, profesionales o de servicio.

Finalmente, para estar exento y, por lo tanto, tener la capacidad de excluir miembros potenciales por motivos de sexo, una fraternidad o hermandad debe considerarse exenta de impuestos según las regulaciones del IRS, y los miembros activos deben ser en su mayoría estudiantes que asisten a una universidad u otro instituto de educación superior. .

La relación entre la vida de fraternidad/hermandad de mujeres de College Park y el Título IX depende del tipo de fraternidad o hermandad de mujeres en cuestión. Para determinar si una hermandad o fraternidad es una organización social o una que debe considerarse de naturaleza profesional, de servicio u honoraria, la Oficina de Derechos Civiles del Departamento de Educación de EE. UU. considera tres cuestiones principales. La primera pregunta es si la membresía en la organización se limita a aquellos interesados ​​en un campo académico o profesión en particular. En segundo lugar, la Oficina considera si la organización sólo ofrece membresía a aquellos con un alto nivel de logros académicos u otros esfuerzos.

La última pregunta es si a los miembros de la fraternidad o hermandad se les permite ser miembros de otras fraternidades o hermandades del mismo nivel educativo. Si la respuesta a cualquiera de estas preguntas es “sí”, la Oficina considera que eso es evidencia de que la fraternidad o hermandad de mujeres no es una fraternidad social con derecho a la exención de las prohibiciones de discriminación del Título IX.

Acoso sexual y violencia sexual en College Park

Las cuestiones del Título IX que preocupan a la mayoría de los funcionarios de College Park en estos días no implican discriminación por membresía sino más bien conducta sexual. Se ha interpretado que las disposiciones contra la discriminación del Título IX prohíben el acoso sexual, que incluye formas de violencia sexual. Todos los institutos de educación superior enfrentan presión para establecer procedimientos para abordar las acusaciones de abuso sexual de una manera que brinde seguridad a todos los estudiantes.

Las fraternidades y hermandades de mujeres están íntimamente conectadas con las universidades pero operan bajo sus propios estatutos. Entonces, en algunos lugares, las escuelas tienen dificultades para hacer cumplir sus procedimientos del Título IX cuando están involucrados miembros de hermandades o fraternidades.

La relación entre la vida de la fraternidad/hermandad de mujeres de College Park y el Título IX se ve aún más confusa por los sistemas de justicia internos establecidos por las organizaciones griegas para regir la conducta de sus miembros. Como informó el periódico del campus de College Park, algunos estudiantes llevan sus acusaciones de violación del Título IX directamente a las fraternidades y hermandades para su decisión.

Aunque la universidad preferiría que los estudiantes buscaran una resolución a través de canales oficiales, la gobernanza separada de las fraternidades y hermandades impide que la escuela tome medidas para impedir que las organizaciones celebren sus propias audiencias internas.

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